lunes, 30 de noviembre de 2015

#VerdadesDolorosas

Capítulo 8


#VerdadesDolorosas


Mientras las sorpresas amorosas han sido para mí similares a una cachetada con guante blanco de la vida, del otro lado del portón, es decir en la vida de Estefany las cosas no lucían tan diferentes, en contraste conmigo ella si había tenido relaciones más duraderas, por lo que eran más bastas sus experiencias, sin embargo tal vez no las mejores pero de esas situaciones aprendimos ambos.
Tiempo después de su última relación duradera ella conoció a otra persona en una de las fiestas entre “niñas” de las cuales yo no era participe, ahí tuvo su flechazo y descubrió su interés por esa nueva persona de carácter firme y fuerte, para quien nunca había grises.
Cuando yo la conocí me cayó excelentemente ya que su personalidad esporádica y alegre siempre me causaba dolor de estómago por tanta risa que me provocaba, con las múltiples ocurrencias que le venían a la mente esporádicamente.
Junto a ellas pase muy buena parte de mi tiempo y compartimos muchas salidas geniales en las que nos divertimos, conocimos gente así como vivimos una de las más grandes etapas de desenfrene con las salidas constantes a diversos lugares.
Pasó que después de un tiempo se presentaron ciertos problemas entre ellas, propios de su convivencia en pareja, en los cuales no me quise involucrar, por ello decidí alejarme. Esto fue por aproximadamente 2 años, los cuales pasaron demasiado rápido y tuve la oportunidad de acércame a otras personas alrededor mío.
Durante ese lapso de tiempo observé la cantidad de problemas que se presentaban entre ambas detrás del ruedo, sin involucrarme y acudía con Estefany cada que lo necesitaba por lo cual seguíamos se cierta forma en contacto al respecto.
Hubo periodos en los cuales incluso por meses no tuvimos conocimiento uno del otro, siendo las etapas más separadas entre ambos, sin embargo era palpable y notorio no ver felices a ambas dentro de la relación, lo cual me dolía por que las consideraba mis amigas, pero ellas tenían que descubrirlo a su propia manera.
Así fue como 5 años rondaron en los cuales sé, hubo momentos de felicidad extrema, incluso vivieron juntas buena parte de la relación dando un giro totalmente diferente en la vida de ambas, al principio admiraba ese hecho y el que lo hubieran logrado me daba esperanza de que algún día eso me pasaría a mí, mas poco a poco al ver el deterioro y las mutaciones que sufría la convivencia me percate de lo complicado que puede llegar a ser la vida con otra persona adicionando esa cantidad de tiempo.
Cuando presentí la llegada del final sobre esta relación observaba a Estefany cansada, veía que ya no le dolían de la misma manera las situaciones que se presentaban y que cada vez se distanciaba más del ambiente nocivo que se iba presentando a su alrededor.
El último día que estuvieron juntas me toco de igual manera estar a su lado, veníamos de una carne asada realizada por unos tíos míos y al regreso discutieron y ella se bajó del auto casi al llegar a su casa, yo me baje detrás dejando las cosas de excelente manera y sin argumentar nada negativo, más diciendo que era mi amiga y que no quería dejarla sola.
Así fue como llegue a su casa incluso anterior a su arribo y se sorprendió de verme ahí, solo platicamos y la observe tranquila al respecto, me sorprendió que ese día ella mostró madurez total al estar ahí determinada a reiniciar su vida.
Después de ello vino un lapso de tristeza en la cual estuve casi obligándola a salir y a que retomará sus actividades y que encontrara algo que hacer, lo cual le ayudará a dejar atrás esa etapa turbolenta.

A través de un esfuerzo constate y avasallador y detrás de continuas negativas triunfé, por lo que poco a poco cual marmota al termino del invierno, fue volviendo a la realidad recuperándose de todo, comenzando desde cero abierta a un futuro que cada vez nos cuestionamos más sobre si lo merecemos, ya que es inhóspito, a veces doloroso, pero siempre se llena de buenos momentos cuando estamos juntos. 

viernes, 27 de noviembre de 2015

#Ilusiones

Capítulo 7


#Ilusiones


Las adaptaciones y transformaciones en la vida son parte esencial en ella y siempre están acompañadas de personas que nos apoyan dentro de dichos procesos los cuales siempre están llenos de aprendizajes que nos otorgan un gran crecimiento personal.
Así es como el día menos pensado aparecen esas personas inmersas en las multitudes y te atrapan con diversas intenciones, las cuales en ocasiones pueden ser positivas, siendo maravillosas y en otras pueden estar cargadas de negatividad.
La primera de estas ilusiones llevó por nombre de farándula “ambar”, a él lo conocí en un café el cual frecuentábamos de nombre “Butterfly”. Apareció como consecuencia de las conversaciones con un amigo cercano a él un día en que nos encontrábamos juntos.
Las primeras impresiones fueron interesantes aunque nada había por esperar ya que se encontraba en una relación, por lo que no era lo más apropiado acercase a una persona en dicho estatus.
Compartimos salidas y una fiesta en particular muy específica realizada en su cumpleaños por su entonces pareja, la cual fue sorprendente ya que brotaba el amor entre ellos a simple vista, sin embargo con el tiempo se separaron.
Representó una simple #Ilusión en mi vida ya que jamás concretamos nada aunque siempre compartimos algo de sentimientos en común, siendo estos un poco más allá de una amistad aunque no cabe duda que las experiencias que vivimos fueron importantes.
Hubo un momento en el que comenzó a involucrarse con un estudiante de medicina, consecuencia de lo cual nació un relación que hasta el momento ha perdurado de forma inesperada, siendo vigente a la actualidad.
La 2da persona en la lista es alguien que siendo aún estudiante de odontología lo conocí en una de las tantas noches de antro, él se acercó a mi preguntándome donde trabajaba y a que me dedicaba y por ello iniciamos una larga conversación, en donde las cosas se fueron dando hasta que comenzamos a salir de forma constante pasando unas noches sumamente divertidas hasta que descubrí que tenía pareja.
Reconozco haber sentido algo de dolor respecto a esta situación ya que éramos ideales, congeniábamos de manera extraordinaria y nos encontrábamos en puntos de nuestra vida en los cuales podíamos llegar a algo aparentemente valioso.
A pesar de todo ello, continuamos saliendo, sin embargo el nunca dejo a esa persona y yo me decidí a cortar de manera sana con todo ello debido a que yo no quería que a mí me hicieran algo similar cuando estuviera con alguien.
Paso un tiempo en que nos distanciamos pero él siguió buscándome de forma constante, volviéndose algo hostigarte y llegando al punto en que el drama era la bisectriz de mí día, convirtiéndome en alguien carente de felicidad y agónico de sentimientos, sin encontrar la salida a todos esos problemas ocasionados por esta situación.
Pude alejarme realmente mucho tiempo después con algunas heridas en el alma y cansado de las relaciones, desgastado y sin esperanzas dejando de lado todo lo que podía sentir por alguien, y conociendo esa parte de mí que nadie quisiéramos ver, esa parte en donde salió lo peor de mí al alejarlo con cada acción hiriente.
Las consecuencias fruto de todo ello provenían principalmente de él ya que yo le había hecho saber que estaba dispuesto a iniciar algo serio, siempre y cuando fuera realmente alguien libre sin compromisos como yo lo era. Nunca sucedió eso, siempre estuvo atado a su relación presa del “agradecimiento” que tenía a esa persona por haberle sacado del closet, cosa que hasta la fecha continúa.
    El tiempo coloca a cada quien en el espacio y momento correcto, soy fiel testigo de ello al encontrar convivencias de tránsito que ayudan a sanar esas heridas, sin embargo después de lo descrito anteriormente fueron alrededor de 2 años los que me mantuve alejado de situaciones sentimentales.
Durante una entrevista de trabajo de nuevo tuve una oportunidad al parecer interesante con mi reclutador, parecía ser trama de una película para adultos como al realizar unos psicométricos él se acercaba a mí siendo algo desconcertante al principio, pero claro fue clave, ya que conseguí el puesto.
Me di la oportunidad de salir con él, aunque fue errónea ya que descubrí que también tenía pareja en el momento que intento algo conmigo, por lo que me aleje inmediatamente anticipando la complicación de las cosas y dándole el espacio propicio para que hiciera lo mismo.
Obviamente continúo sobre mí y siendo el de recursos humanos insistió por métodos no gratos, involucrando lo laboral para que pasara algo entre nosotros, hasta que yo presa de mi necesidad por trabajar, lo acepté. Lo sorprendente en esto es que nunca pude dejar que sucediera nada, cuando iba a pasar algo lo evitaba de mil y un maneras llevando a esta persona a fastidiarse de mí, dejándome libre.
Una vez en este puesto laboral conocí a otra persona de menor edad que yo siendo alguien que al principio me pareció simpático y de buena actitud, aunque conforme lo fui conociendo me di cuenta de que era alguien carente de varias virtudes clave, las cuales solo el tiempo se las proporcionaría pero a pesar de saberlo termine involucrado con él.
Las experiencias fueron llenas de risas y buenas situaciones, siempre fue alguien que mostró interés en mí, sin embargo al hacerle notar la seriedad de mis intenciones inmediatamente se colocó una barrera y comenzó a alejarse.
Por mi parte hice lo mismo, hasta que un día en el cumpleaños de mi amiga Estefany él comenzó una relación con Juan Carlos, ¡esa misma noche! Lo que cual me hizo conocer la palabra “perder el control” al arruinar el cumpleaños de mi amiga alejándome de todos y dejando todo olvidado, ese día fue pésimo, pero lleva a un tema separado de este relato.
Una de mis Ilusiones más grandes llego en Noviembre de 2014 cuando laborando en el aeropuerto de mi ciudad recibí la visita de una persona de ojos color miel, cabello oscuro, con acento evidente de otra ciudad, el cual me solicitó información sobre la llegada de un vuelo proveniente de Atlanta, nunca me imaginé que ese cruce de miradas desataría toda una historia que puedo catalogar como de las más importantes de mi vida.
Después de informarle e indicarle donde podría recibir a sus familiares se retiró, yo quede un tanto sorprendido por su actitud cortes y su mirada la cual destellaba interés, y mi sorpresa fue grande al topármelo en mi descanso y observando como él se quedó a mi lado y comenzamos una charla inusual detonada por un “puedo acompañarte en tu descanso falta tiempo para que mis familiares lleguen” a lo que respondí de forma instantánea con un sí. 
Conversamos de nuestros intereses del porque estábamos en un aeropuerto tanto él como yo, me porte reservado por las cuestiones de seguridad que implicaban mis labores, sin embargo de mi le hable todo lo que pude, dejándolo enganchado.
Al llegar las personas que esperaba se retiró y al volver a mi área de trabajo fue sensacional encontrar un papel hecho bola con su teléfono, el cual añadí de forma inmediata y comencé el contacto más allá de lo esperado.
Consecuente a ello me sucedió algo que en dos ocasiones he vivido, esta fue la primera vez. Considero hay dos tipos de relaciones, las que se inician de forma común y en las que sin darse cuenta o notarlo se adentran ambas partes. A mí me pasó la segunda fui presa de ese contacto más allá de la amistad, del cual una vez dentro me percaté.
Era el amor más puro que había experimentado, sin barreras, sin cuestionamientos sabiendo que nos teníamos él y yo tal vez para toda la vida, derrochábamos felicidad, guardábamos momentos cada vez más emotivos y comprometidos, llegando al punto en el cual todo ello ya no cabía en mi corazón de lo portentoso que era.
El instante más significativo fue cuando se me declaró, en el aeropuerto una tarde, llevándome un café de Punta del Cielo, el mejor para mí, lo cual con anterioridad le había compartido y supo utilizarlo para ese momento. En una servilleta escribió su declaratoria añorando el sí, diciéndome que si deseaba que fuera mi superman.
Mi respuesta inmediata fue de rechazo, ya que llevábamos cerca de 3 semanas de conocernos y no quería adelantarme a las cosas, quería que todo fuera perfecto, hasta que te das cuenta que el tiempo y los estándares son relativos cuando los sentimientos son fluorescentes, y más cuando al hacer yo un berrinche me siguió y me beso frente a las maletas, pasajeros, cámaras y locatarios del aeropuerto. Fue algo arriesgado que después no me importo. Entonces cambie de opinión y dije ¡Sí!
No cabíamos de felicidad, una vez que termine mi turno nos fuimos a celebrarlo a un restaurante en la zona de providencia dentro de la ciudad, donde puedo describirlo como uno de los mejores días de mi vida, me hizo muy feliz esa noche, ese momento y los días consecutivos.
Hablábamos demasiado nos veíamos todos los días me contaba sus secretos mas íntimos, y yo de igual manera, lo veía lo besaba, me encantaba sorprenderlo en la banca donde siempre me esperaba al salir de mi turno, y recibí comentarios de compañeros de aerolíneas en los que me decían que nos veíamos muy felices como pareja y así era.
Incluso pensamos en vivir juntos, en hijos, en cambiarnos de ciudad ya que existía la posibilidad de radicar en Mérida, a lo cual yo me sentía abierto, deseaba dar ese paso y dejarlo todo por alguien me sentía muy enamorado, inspirado y pleno.
Un día me invitó a su casa con motivo de una fiesta en donde conviviría con su familia, hecho que sucedió excelentemente, lo mejor fue tirarnos en su jardín viendo las estrellas cuando nos quedamos solos, añorando, soñando haciéndonos cosquillas y riendo, deteniendo el tiempo, simplemente mirándonos.
Subimos a su cuarto, dormimos abrazados, reconfortantemente, y una vez por la mañana el me llevaría al trabajo, por lo cual procedí a bañarme y a prepararme para hacer escala en mi casa y colocarme el uniforme. Conocía en tan poco tiempo tanto de mí que me preparaba café con mi gusto exacto.
Después de toda la rutina mencionada, subimos al auto y entonces al llegar cerca de mi casa le pregunte por que había estado tan pensativo por la noche y le argumente que pude percatarme que no había dormido mucho, y fui correspondido con sonidos titubeantes emitidos de su boca, los cuales me preocuparon.
No sabía lo que me esperaba pero fue el primer momento que tuve lleno de duda y sentimientos extraños entre nosotros desde que lo conocí, aunque no tenía conocimiento de la tormenta que venía la cual llego bajo las siguientes palabras: - tengo q decirte que hay algo que te he ocultado y es que yo soy VIH positivo-.
   El silencio reino por cerca de 4 minutos, no podía responder, algo me carcomía por dentro, algo muy intenso era más allá de lo peor que me había sentido ante cualquier situación, fue posible percibir como me partían el alma desgarrándola a trozos pequeños y pisoteando cada uno ellos, fue como mil golpes sofocantes en la boca del estómago.
Era tanto el dolor que no fui consiente de mis lágrimas ni de donde estaba cuando me baje del auto, de manera automática camine hasta mi casa me cambie al uniforme y al verme al espejo tenía ese rostro pálido blancoso, presa de pesimismo, ira y decepción, definido en una exacta palabra conocida como traición.
 Recuerdo cuando salí hacia mi trabajo haberle visto fuera de casa en su carro con un rostro 3 veces peor que el mío, llorando cual niño pequeño viéndome pasar a su lado sobre la banqueta, pero sin hablarme dejándome ir en silencio, sólo opacando la ausencia de sonido a través de sus sollozos.
Ese día trabaje no sé cómo, estaba en un mode on automático con su esencia por todo el aeropuerto, llorando en cada visita al baño o haciendo visitas al sanitario para romper en llanto, deseando sacar de mi alma ese ardor intenso, buscando una razón para entenderlo, abriendo un poco de espacio para la empatía que no llegaba, que no entendía que no quería proporcionársela, que no la merecía.
Al terminar mi turno se apareció como cualquier día en mi área de trabajo y simplemente lo ignore, levante el teléfono marque a seguridad en cuando sus ojos claros se cruzaron con los míos y pedí apoyo para que lo sacarán, cosa que sucedió en un instante y él no mostro resistencia al hecho.
Varios días después continuo buscándome, ya que sabía mis horarios y nunca le correspondí, me costó mucho dirigirle la palabra de nuevo, lo cual logré con un poco de tiempo, pero fue una herida que no he podido superar hasta el momento y que no sé si algún día pueda verlo sin rencor, poniendo el contador en cero, dándole un espacio en blanco para escribir una nueva historia al respecto.
Mi siguiente acto después de ello fue realizarme exámenes sobre el VIH, nunca tuve contacto sexualmente hablando con él por lo que sabía no corría riesgo alguno sin embargo lo hice como parte de las precauciones. Mi resultado fue negativo y me sentí aliviado, tome los trozos alrededor mío y seguí adelante con mi vida de forma convexa, cóncava, sin visiones del futuro, enterrando el pasado y tratando de sanar.  
Así el tiempo hizo por mí algo muy significativo al toparme con una persona que al principio representó un flechazo importante al tener temas en común actitudes similares, tan parecidas que creo fue la parte que nos polarizo al final de esta historia.
Lo conocí el día menos pensado en el lugar más inimaginado, siendo presa de caprichos de una amiga por ir a un bar, el cual para mí no era el mejor ni el más añorado. Al presentármelo lo juzgue como un gay más con el estilo de moda, las tendencias “trendy”, fue tan poco predecible ese hecho que me tomo por sorpresa, no creí poder volver a relacionarme con alguien después de todo lo que había pasado en meses recientes, sin embargo él lo logro a través de sus invitaciones a salir y las conversaciones interesantes.
Poco a poco abrí las posibilidades a ello, singularmente un hecho que no puedo negar fue que el día que lo conocí pude ver alrededor suyo un brillo extraño que en ninguna persona he vuelto a observar, y junto a ello un dejavu, el cual al analizarlo me llevo a fragmentos de un sueño que había tenido, creo que estábamos destinados a conocernos.
Ante todo represento sanación ante mis trozos de corazón que estaban regados por todos lados en mi vida sentimental, y me ayudo a superar esa parte turbulenta que viví, sin embargo siempre sentí algo contradictorio dentro de mí que no me permitía ser completamente yo a su lado y nunca pude explicarlo, pero a pesar de ello continúe hasta el final.
Todo fluía de manera perfecta, había armonía y caí presa de todo en un enamoramiento que me llevo a confesárselo, dándome cuenta que no era correspondido en ello. No perdí la calma y decidí continuar ante sus acciones tibias referentes al suceso hasta que en una muy buena charla conocida como “intervención”, mis amigas me hicieron ver las cosas y entendí que realmente en mis manos no estaba el destino entre ambos. Y es que aún tenía rastros en mí de lo acontecido con anterioridad y no me encontraba listo para luchar o aferrarme a algo así, en ocasiones no sentía nada aun estando a su lado, las sensaciones mágicas llegaron tarde casi al final cuando sabía que no había nada que esperar entre ambos, irónicamente en ese lapso comenzó ese brillo en mis ojos por él.
Fue entonces cuando decidí apartarme, dándome cuenta que no era para mí, observando muchos aspectos en los cuales nos dirigíamos a cosas diferentes, y simplemente los estilos de vida no tenían muchas similitudes, yo siempre he sido una persona determinada y comprometida, nunca titubeo, aun en mis malas decisiones, situación que él no llevaba muy bien.
Entre más situaciones mi estabilidad, mis proyectos y mi futuro no podían compaginar con alguien que no tenía definido su siguiente paso en la vida. De todo ello agradezco a mi amigas por hacerme notarlo, aunque eran situaciones obvias a veces, el estar enamorado no te permite admirar los 360° de los sucesos. Nuestros caminos eran muy aislados y separados, objetivos diferentes nos distanciaban a pesar de toda la química de la que fuimos víctima.    
Así fugaz como apareció, fue su desvanecimiento, el cual formó parte de una etapa de cambios, permitiéndome prepararme para lo siguiente en mi vida futura, empezando de cero, ya que no me costó dejarlo atrás debido a que yo tenía una cantidad enorme de problemas durante ese tiempo relacionados a un fracaso en lo laboral que tuvo consecuencias más amplias de las esperadas, en lo económico y en mi sueños, al no poder viajar a un lugar el cual tenía planeado en fechas cercanas, por ello el impacto no fue tan intenso y mi mente se ocupaba en otros ámbitos que requerían acciones inmediatas y no me dejaban espacio para pensar en él.  
Aunque aún extraño, y me cuesta admitirlo, a ese gran amor de aeropuerto, que fue de igual manera la más grande traición que he vivido, creo que cada día sano más al respecto y a pesar de tener varios errores llenos de aprendizaje sigo fiel a mi principio de rodearme con personas que valoren mi esencia y estén dispuestos a vivir momentos llenos de frenesí y risas, porque sé que llegará ese ideal a quien realmente podré amar y con quién compartiré la mejor etapa de mi paso por este planeta.  

Ha sido un camino difícil, creo que aun será más complicado las #Ilusiones nos mantienen con vida y es parte de la chispa sinérgica que endulza nuestra cotidianidad, por lo que me siento completo y pleno con las partes que ya he superado y me doy cuenta que cada vez me convierto en una mejor persona, y que mis reacciones siempre me han llevado a obtener situaciones benéficas, haciéndome vivir grandes momentos con personas valiosas.   

lunes, 9 de noviembre de 2015

#Popocatépetl

Capítulo 6


#Popocatépetl



Los viajes nos hacen aprender demasiado ya que enriquecen nuestra alma al brindarnos otra visión de la vida diaria, lo que nos lleva a conocer diferentes costumbres, usos, tradiciones, dichos y demás elementos que harán de nuestra persona alguien más completo.
Aventurado y ya instalado en mi carrera de Turismo, se presentó la oportunidad de asistir a un viaje en el cual por la clase de Historia del arte en México se visitarían los primeros 16 monasterios alrededor del volcán Popocatépetl y algunas ciudades alrededor de dichos, puntos en donde pernoctaríamos.

#Cuernavaca

Salimos un viernes por la noche de Guadalajara llegando al primero punto que fue la ciudad de Cuernavaca a la mañana siguiente, y descubrimos la magia que hay en esa ciudad así como los desniveles en terreno que posee en toda su composición como tal.
Nos instalamos y salimos a las pocas horas hacia las grutas de Cacahuamilpa en el estado de Guerrero las cuales se encontraban cercanas a esta ciudad antes mencionada y continuamos a Taxco de Alarcón en donde apreciamos los diversos locales que trabajan la plata así como su arquitectura singular y la hermosa fachada que posee la catedral de Santa Prisca.
Al regreso de esta población ingerimos algunas cervezas a bordo del autobús creando un excelente ambiente al pasar el cartón de cervezas de un lado a otro, siempre con la mejor actitud y abiertos a lo que pudiera pasar.
Al llegar al establecimiento de hospedaje parte de la tarde noche se nos dio libre por lo cual decidimos salir a antrear. Para ello yo había realizado una muy seria y completa investigación al respecto de las ubicaciones de los mejores lugares de la urbe que vive en “eterna primavera”, por lo que ya sabía que podíamos encontrar.
Inmediatamente calenté la plancha del cabello, y comencé a arreglarme preparándome para una gran noche, la cual esperaba desde meses atrás de forma inmensurable. Al estar preparado para todo ello y armado con mi cajetilla de cigarros, encendedor y demás elementos pase por mi acompañante a su cuarto y salimos rumbo a la aventura.
Tomamos un taxi al cual le pedimos nos llevara a “La casa del Dictador” antro gay de moda ubicado en la zona residencial de la ciudad hacia el norte, al cual llegamos 15 minutos después. Con un cover de $50 y sin hora de cierre nos dispusimos a dar el primer paso en el establecimiento el cual lleno de jardines y payasos nos recibió haciéndonos colocar una cara de sorpresa enorme ante tanta originalidad.
Con una excelente música nos recibió el lugar, el cual ambientado cual mansión terrorífica y con sus 4 pistas de baile nos invitaba a dar nuestros mejores pasos de baile. Sin pensarlo nos dirigimos a la barra y adquirimos nuestra primera bebida, riendo y aguardando las sorpresas de la noche.
La sensación de libertad que experimente esa vez, dejo marca en mí ya que en esa ciudad nadie me conocía no tenía hora de llegada a casa y podía realmente hacer lo que yo quisiera sin temor a que alguien comentará algo de lo que yo hiciera. Por ello me sentí tan pleno que cuando algún problema se me presenta trato de aferrarme a ese recuerdo y dejo ir todo lo que pueda sentir llegando a ese estado de felicidad absoluta por un instante.
Así entonces mientras acompañaba a Estefany al baño, llego el primer hecho de la noche en el cual ella conoció a unas chavas con las cuales pasamos buena parte de la noche, siendo tema una de ellas quien vivió en Guadalajara un tiempo. Basados en ese tema de conversación expandimos la conexión hasta llegar a un chavo que se reunió tiempo después con todos nosotros.  
De mi parte, el nuevo adepto del grupo comenzó a simpatizar conmigo creando un vínculo interesante que al final del día quedo solo en eso, ya que al avanzar la noche su estado etílico no le permitía realizar mayores hazañas, de hecho en algunas ocasiones había que cuidarle los pasos.
Del lado de mi acompañante de viaje, la situación se mostraba más prometedora ya que congeniaba de mejor manera las chavas y logro enganchar a una de ellas que estuvo con nosotros a lo largo de la noche sin importarle la hora.
Casi a las 5am salimos del lugar asaltados por el cansancio del viaje y regresamos al hotel satisfechos después de haber bailado con Offer NIssim y haber convivido con parte de la socialité de la ciudad y algunos del Distrito Federal ya que es usual encontrarse a personas que pasan el fin de semana regularmente en esa urbe metropolitana.
Durmiendo solo 3hrs despertamos con la emoción de nuestro siguiente punto en el camino que nos llevaría como destino final al zenith de esta aventura en la maravillosa y colonial #Puebla

#Puebla

Conocida de mejor manera como la ciudad de los ángeles, llena de iglesias y testigo fiel de los mejores años de la colonia española, enmarco una de nuestras más grandes aventuras en las que se vieron involucrados todos los integrantes del viaje. Hoy me suena algo divertido y osado, pero no desearía volver a sentir la angustia que viví en esos momentos.
8am fue la hora en que salimos en el autobús hacia Tepoztlán, Morelos para continuar la ruta pendiente y recorrimos de igual manera más poblaciones algunas de Morelos y otras de Puebla en donde los estilos arquitectónicos cambiaban mostrando grandes necesidades de la época al ser para esas fechas inhóspitas tierras.
Fue un recorrido intenso que nos tomó prácticamente todo el día pero fue enriquecedor aun con la cruda que sosteníamos y la desvelada por todo lo vivido una noche antes. Tratando de curarnos de ella intentamos de todo, comiendo nieves, agua, refresco y lo que encontrábamos a nuestro paso.
De repente en un instante se dieron las 9pm, hora en la que entramos a la ciudad de Puebla y pasamos justo cerca de la catedral. Desde nuestro lugar en el autobús logramos apreciar un lugar de “ambiente “con una bandera enorme que lo identificaba arriba de los portales del centro histórico, ya que en internet no logré obtener mayor información al respecto de establecimientos con estas características, terminamos en dicho lugar.
De nombre “Soberbias” y en un segundo piso, una vez que dejamos equipaje y nos instalamos en el hotel tomamos la decisión de acudir con singular gozo y alegría a pesar de nuestra devastación interna y externa.
Entramos y confieso que lo primero que atrajo mi atención fue la estatura promedio de las personas, ya que todos eran más bajitos que yo, por lo que al momento de bailar sobresalía, lo que me causaba un poco de extrañeza.
Todos tomaban cervezas directo de los cartones que las contienen, dichos se encontraban fríos y aun lado de ellos, cada mesa poseía una bolsa de churros de “culebrita”, lo que me llevo a comprender que era diferente el concepto del servicio en esa ciudad.
Para esa etapa del viaje ya nos encontrábamos un poco gastados, por lo cual era sumamente importante hacer rendir el poco efectivo con el contábamos, así que nos dispusimos a tomar solo una cerveza cada quien rogando un milagro para continuar la fiesta.
Al parecer el cielo nos tenía consentidos ya que un chavo frente a nosotros y cerca de la barra llevaba ya varios minutos ahí de pie, esperando a que alguien llegara sin tener éxito. Por ciertos instantes mostraba desesperación ya que se veía no era un lugar que frecuentara.
Después de algunos minutos él se acercó con nosotros comentándonos que nos regalaba 2 cervezas debido a que ya se retiraría porque, efectivamente como lo habíamos supuesto, no había llegado a quien esperaba. Nosotros eternamente agradecidos aceptamos el alcohol como manjar preciado y le invitamos a sentarse y a que nos contara su historia al respecto, razón por la cual nos enteramos que le estaban jugando una broma al citarlo en ese lugar.
En el calor de la conversación compartimos nuestro origen, Guadalajara e inmediatamente se sorprendió así que continuamos conviviendo y vinculándonos hasta que él nos regaló un cartón de cerveza León el cual inmediatamente fue presa de nuestras garras, aunado a nuestra bolsa de churritos.
La noche se perfilo excelente bailando según la música electrónica del momento hasta que descubrimos un concepto poblano basado en la cumbia ya casi para el cierre del lugar, el cual todos siguieron inmediatamente, menos yo, ya que el baile realmente nunca ha sido una de mis virtudes.
En mí el cansancio hacía estragos por lo que le comente a Estefany que era hora de volver al hotel y que no aguantaba estar más tiempo despierto, recordándole que mañana habría que salir temprano hacia otro de los puntos parte del recorrido. Ella no quería irse e insistió en permanecer un lapso más de tiempo con nuestro ahora amigo Julio.
Julio me dijo que si deseaba irme podía hacerlo y que él la llevaba al hotel en el momento en que el establecimiento cerrara. Siendo un total desconocido, pero aparentemente con buenas intenciones y presionado por Estefany para que aceptara, accedí a todo.
Me retire al hotel y me lleve la sorpresa de mi vida al toparme a mi compañero de cuarto besándose con otro hombre de mayor edad en la entrada, con el cual se veía sostenía acalorado romance. Al verme se puso pálido e inmediatamente me dijo que no me moviera que lo esperara y termino con su actividad amorosa.
Inmediatamente me pidió le guardara el secreto y comenzó a hablarme de su salida del closet y de cómo había sido su vida hasta ese momento, a lo cual correspondí con mis ya contadas historias. Creamos un acercamiento fuerte y nos complementamos, por ello al amanecer siguiente nos vimos con mayor confianza y sentimos el apoyo entre ambos.
Cuando colocamos todo el equipaje en el autobús y estábamos listos para irnos al siguiente punto, comenzó la parte del terror al momento en que las compañeras de cuarto de Estefany confesaron que no había llegado a su habitación.
Yo me tranquilice y recordé que Julio se encontraba con ella y de igual forma sabía que el mundo no se le cerraría y que encontraría la forma de regresar, por ello no me preocupé y comente ante todos que tenía conocidos en puebla y que esa era la razón por la cual no se encontraba, pero argumente que ella tenía noción del itinerario así que estaba enterada del regreso a las 5pm y que volveríamos a la ciudad más tarde para dar por concluido el viaje.
Por dichos comentarios el recorrido continúo según lo planeado y supusimos que a las 2pm que regresáramos al hotel ella se encontraría ahí esperándonos, cosa que no sucedió. Con sorpresa note la preocupación de la maestra, quien organizo grupos de búsqueda para ver la posibilidad de que ella no recordará donde se encontraba el hotel. Mi total ansiedad estalló cuando 4pm la docente anunció que si ella no aparecía no nos iríamos.
A las 4:30pm presa del peor de los escenarios la vi sobre una banqueta a un costado de la catedral, recuerdo que le grite, corrí, la abracé y comencé a regañarla dando un sermón épico por todo lo que me había hecho pasar consecuente a su desaparición.   
A nuestro reencuentro empezó a compartirme los detalles de su desaparición, los cuales tuvieron que ver con un after en la plaza dorada al cierre del antro en el que nos encontrábamos originalmente y al cual fue acompañada de Julio, sin embargo este último personaje tuvo que retirarse presa del sueño y cansancio.
Después de que él se fue, convivio con una chava quien tenía pareja, la cual por razones de celos le obligaba a ingerir cervezas que ella le destapaba a golpe de mesa prácticamente, quebrando el cuello de la botella. De carácter amenazante y aspecto áspero, fue como Estefy percibía el comportamiento de la persona en estado de celos, por esto no interponía ningún hincapié en tomar la cerveza aunque contuviera trozos de vidrio en su interior.  
Más tarde la otra chava le comentó que podía llevarla al hotel, lo cual Estefany aceptó sin saber que primero se trasladarían a su casa. En dicho lugar por el cansancio ella se quedó dormida y cuando despertó eran las 4pm. Tuvo que rogarle e insistirle a la persona con la que salió del after para que le acompañara hasta el hotel. Así entonces fue como la encontré en esa esquina donde fue posible vernos y dar por terminado el viaje.  
Al momento de subirnos al autobús las miradas de la mayoría de los que se encontraban en su asiento asignado fueron de odio ya que como lo comente antes hubo grupos de búsqueda y preocupación general al respecto de lo sucedido.
Regresamos a Guadalajara y recuerdo como esas 10hrs de viaje en el autobús para mí representaron 5 minutos ya que el cansancio paso factura en mi aun días después de haber llegado a mi lugar de origen.

Nunca pensamos que volveríamos a ver a Julio, así que fue grande nuestra sorpresa cuando él de forma constante comenzó a visitarnos en Guadalajara y lo llevamos a conocer los lugares más típicos, con ello nació una amistad que hasta el día de hoy es vigente aunque actualmente se encuentre en el estado de Zacatecas. 

domingo, 8 de noviembre de 2015

#Sensitivísmo

Capítulo 5

#Sensitivísmo


Las experiencias sensoriales son las más atrayentes en la vida: tacto, gusto, olfato, oído y vista son nuestros adaptadores cerebrales a la realidad que nos rodea. No existen dos verdades en el mundo solo hay una y la adecuación de nuestra mente a ella nos convierte en personas congruentes. La congruencia es el esplendor de la verdad, ya que ella es reflejo del equilibrio exacto entre lo que se dice con lo que se hace y aunque es difícil mantenerla, siempre al ser parte de nosotros dentro de nuestras virtudes hay asegurado un camino prodigioso hacia nuestras metas y objetivos.
Contrario a ello, existen experiencias que pueden describirse como extrasensoriales en donde la agudeza de un solo receptor de los antes mencionados pude llevarnos a vivir momentos fuera de lo que las personas llegan a percibir en estado cotidiano, y que lejos de ser algo nocivo, puede ser un apoyo para sanar el alma.
Así comenzó nuestro camino en las sustancias extrasensoriales que nos llevaban a vivir un sensitivísmo único el cual lejos de asustarnos nos llenaba de más y más capítulos en nuestras salidas, conociendo cada vez a mayor cantidad de personas y acumulando sensaciones nuevas que nos hacían ver de otra manera nuestras situaciones propias del día a día.
  Una mañana me dirigí con ella a un lugar conocido como el tianguis cultural aquí en Guadalajara en el cual su característica principal es la venta de artículos de índole más radical y relajado, lo que abarca desde instrumentos para fumar cualquier tipo de planta hasta ropa con diseños elaborados propiamente por los vendedores. Bajo este panorama ella me invito un brownie que una chava vendía en un servilletero tapado de forma sospechosa.
Yo nunca pensé mal al respecto me imagine que eran producto de algún tipo de rama vegetariana o referente a un movimiento similar al ver el contexto alrededor mío, por lo que consumí dicha variedad de pan con singular alegría sin miedos, inhibiciones o dudas.
Al paso de las horas sentí como mi cuerpo cada vez se hacía más pesado y torpe, de igual manera mis ojos se cerraban y no tenía sueño solo una pesadez increíble que no me permitía moverme hacia ningún lado lo que me llevo a sospechar acerca de lo que había ingerido.
Mi primer pensamiento fue que me había intoxicado con alguno de los componentes, más como primer paso decidí preguntar cuál era el ingrediente singular que contenían y mi sorpresa fue enorme al percatarme que tenían cannabis. Aunque admito que eran deliciosos y el toque que esa singular planta feliz les daba denotaba tonos de sabor inigualable. Tanto fue lo que me gustaron que después en un cumpleaños tuve un pastel similar de chocolate y unas galletas inigualables, eso será más adelante.
Admito, reconozco y comparto que no fue una experiencia desagradable, por lo contrario me gustó, pero no era parte de mí, así que nunca fue algo que se quedará arraigado. Simplemente era una experiencia que me parecía espectacular para ciertas ocasiones especiales.
Tiempo después cuando me encontraba en el apogeo de mí gusto por la música electrónica se presentaron ante mí las posibilidades infinitas de los químicos, siendo el único por el cual simpatice la metanfetamina, o mejor conocidas como “tachas”. Fue un día que me encontraba escuchando al Dj No.1 del mundo en ese momento Armin Van Buuren cuando decidí aventurarme con una de las “piscis doble”, de la cual un cuarto de ella, coqueta en forma de pez trabajo en mi por algunas horas.
Fue realmente sorprendente como disfrute ese concierto que añoraba y esperaba desde hace mucho tiempo y fue una experiencia única como al escuchar cada una de esas mezclas se despertaban sensaciones de euforia que no había conocido hasta ese día.  
Estefany estaba conmigo en esa ocasión satisfecha después de algunos años de remordimiento cuando por primera vez vino ese Dj a Guadalajara y no pudo contactarme para ir a ese evento a pesar de que ella me había invitado y contaba con los boletos. Todo sucedió debido a que no tenía pila en su celular y no conocía mi número para localizarme. Ante ese suceso admito que me sentí decepcionado por que esperaba con gusto ese evento, sin embargo entendí que las cosas pasan por algo y no cambiaría por nada ese día en que por fin tuve la oportunidad de verlo.

Ella tuvo momentos diferentes hablando de estos temas, ya que se adentró en este mundo por más tiempo recopilando mayor cantidad de experiencias sobre diversos sucesos relacionados, lo cual le llevó a conocer a un mayor número de personas con las cuales después yo convivía y he de resaltar que algunas se convirtieron en muy buenas amistades, vigentes hasta el día de hoy. 

sábado, 7 de noviembre de 2015

#AmigaMía


Capítulo 4


#AmigaMía



Mientras tanto del otro lado del ocaso, Estefy se encontraba enganchada con una esperanza basada en una compañera, de igual manera de la preparatoria, a quién conocí por ella. Al principio para mí de personalidad excéntrica, gustos selectos pero siempre siendo ella. Un día al salir de la jornada estudiantil nos acompañó una parte del trayecto a casa y fue curioso como realizando una competencia simple sobre despegar folletos publicitarios de las puertas de las casas por las que íbamos pasando entendimos que había mucho en común entre nosotros.
Seguimos conviviendo al lado de su humor singular, compuesto principalmente por gritos, gestos y miradas. Era divertido estar a su lado. Ella y yo, pasamos una etapa en la que comenzamos a criticar personas sin razón alguna, siempre encontrando defectos, nunca una virtud, ropa, zapatos, cabello, todo entraba bajo nuestros filosos colmillos de víbora llenos de veneno esperando más víctimas. De hecho ni la propia Estefany se salvaba de nuestros congelantes cariños de reptil de sangre fría. Actualmente es la única persona con la que continuamos esta dulce tradición lo demás era una etapa en la que terminaba doblado de risa lo admito, me gustaba y lo disfrute demasiado, pero la vida es más que eso, sobre todo cuando el karma comienza a pasarte ese voucher en una bandeja para que firmes con lágrimas y humillación el ticket consecuente por las malas acciones del pasado.
Dentro de esta convivencia fue surgiendo ese sentimiento de parte de mi mejor amiga que poco a poco yo notaba más, sin embargo mantenía perfil bajo, esperando escuchar de sus dulces labios esa confesión relacionada al hecho, la cual pronto llego cargada de un gran argumento vigente y actual que todo gay que se respete llega a tener: “¿Crees que si sea?”.
Esa frase destroza vidas, almas y generaciones, visto estaba que los comportamientos de Silvia (la chava en cuestión) daban mucho a dudar, ya que no era lo bastante femenina pero tampoco carecía de instinto de damisela, era más bien un apartado de los perfiles que las mujeres con cotidianidad muestran, por lo cual no había mucho por donde tomar datos de referencia.
La encrucijada cada día se hacía mayor, yo no me atrevía a comentarle nada trataba de mantenerme en la línea fuera de ello con todas mis fuerzas, sin embargo eran mis amigas ambas y por lo tanto quería su felicidad, eso aunado a que a veces no calculó las dimensiones de mis actos, me llevo a confesarle a Silvia en un receso el amor de Estefany por ella.
Silvia quedo impactada, no sabía que decirme y sólo minoro el tema y continuamos el día de manera usual hasta que recibí un mensaje de texto de Estefany en el que me pedía le explicará cómo se enteró su dulce amor añorado de esa información. Hay un dicho que dice “no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan” en mi caso aplicaba aunque a mí ya me habían hecho algo referente a la confesión de verdades ajenas. Sin querer cometí el mismo error que tanto critique cuando a mí me sucedió.
No supe que responder, más termine confesando que fui yo el que le dije que era responsable de ello y cree el magnífico discurso basado en la amistad y en cómo me dolía verlas separadas, argumentando que harían una buena pareja y demás excedentes que me apoyaran con una gran tangente para escapar y obtener el perdón lo más rápido posible.
En los momentos de disgusto que tuvimos por esta situación siempre escuchaba la canción de Alejandro Sanz #AmigaMía, identificándome con ella por todo lo que veía a mi lado en esa etapa, la cual ahora me da risa, como muchas partes irónicas y sarcásticas del pasado.
Así entre flechazos, retracciones, ataques, cartas y ocasiones que estuve de cupido llevando mensajes, regalos, globos y más cosas entre una y otra tortilla, llegamos a un día clave en el que Estefany desesperada, una vez que la había visitado llevándole uno de esos “encargos de Silvia”, me acompaño a la parada del autobús en una avenida sumamente transitada cerca de su casa en donde de repente ante mis ojos se desplomo después de llevar varias horas de “Silviasesión” cayó en la desesperación y pánico porque ya no sabía si sería correspondida.
Yo como buen amigo me senté a su lado a un costado de la banqueta escuchándole y viéndole sacar sus lágrimas, fue entonces cuando realmente entendí que era algo más serio de lo que pensaba y decidí ayudarla, aunque no fue necesario ellas comenzaron su relación al poco tiempo, dándome la sorpresa de mi vida al ver como a veces las cosas por sí mismas toman el rumbo que deben hacerlo.
Permanecieron juntas varios años siendo un proceso lleno de experiencias que me toco compartir con ambas ya que eran mis mejores amigas, resaltando que dentro de lo lindo y soñado de ese tiempo también hubo nubes negras cuando me veía inmiscuido en comentarios de una situación ya que tenia versiones de ambas partes y en ocasiones terminaba confundido o preocupado, cosas que a pesar de no querer sobrepasarlas en algunas ocasiones terminé inmiscuyéndome creando a veces tensión.

Desafortunadamente esto no se sabe hasta que te involucras en un círculo de estas características y fue para mí valioso lo obtenido por qué conocí la manera más adecuada de establecer mis límites de forma sana y obtuve la pericia para convivir cuando las dos partes de una relación son valiosas para mí. #MeSalvéDelCaos

#Decepción

Capitulo 3


#Decepción


Nunca sabemos cuándo el destino nos pondrá a alguien frente a nosotros de valor considerable para entablar una relación de cualquier tipo, así que las posibilidades de predestinar un acontecimiento en este aspecto son algo dadas a probabilidades que ni la estadística es capaz de ayudar como un instrumento de medición.
A veces creemos tener la capacidad de predecir las cosas, más sin embargo es algo complicado el lograr hacerlo ya que cada persona por su propia identidad es un abanico multicolor de sorpresas ironías, virtudes y defectos.
Así de esas formas inexplicables, suelen pasar cosas extraordinarias que nos recuerdan la esencia de nuestra existencia y que gracias a esos pocos momentos de gloria nos mantenemos con vida, día a día, en la expectativa de recopilar más de ellos y dejar de lado los malos recuerdos.
De esta manera fue como conocí a alguien especial cuando tenía 18 años, él de 24 con un importante trabajo, yo en pleno desarrollo profesional, dentro de los estudios universitarios, ilusionable, idealista y tímido, aunque gracias a esa persona comencé a ser alguien más extrovertido.
Es como la historia más común de amor que se escucha por todos lados, la diferencia radica cuándo tú eres el protagonista, y en esta ocasión así fue. Recuerdo que salimos con intención de acudir a un café, ya que eran épocas en que el alcohol y yo estábamos conociéndonos pero aún no éramos lo amigos que somos hoy. 
Fue esa la primera vez que sentí ese acelere de corazón, ese apretón de intestino, esos giros constantes de la mente en donde repites tu “speech” y tratas de crear un mapa mental de las posibles preguntas a las que serás sometido y clasificas tú información a compartir de la forma más adecuada bajo tú criterio. Con el tiempo me di cuenta que todo eso es cansado y que realmente la mejor metodología cuando conoces a alguien es ser tú mismo, ya que de todas formas siempre serás tú, y las máscaras o facetas siempre cansan y desgastan.
Una vez que llegué al punto acordado en un parque del centro de la ciudad, él ya se encontraba ahí con su camisa azul claro, sus lentes de sol y un pantalón de mezclilla que le hacía ver genial. Inmediatamente me acerque y mis primeras palabras fueron confusas, contradictorias e inexplicables, ya que los nervios me destrozaban de forma devastante. Él comenzó la conversación y me dijo: “estas que te mueres de los nervios, ¿verdad?” y le respondí con otro tartamudeo para corroborar la información.
Por ello la batuta de esa primera cita fue tomada obviamente no fue mía, lo cual nos llevó a un lugar interesante, en donde las horas de charla se alargaron de forma impensable hasta ser lo más cercano a un sueño por las sensaciones tan maravillosas que ocurrían dentro de mí.
Ese puede catalogarse como mi comienzo en el asunto del amor, ya que la pase increíble y me sentí aceptado de una manera tan extraordinaria que hasta la consideraba inexplicable. Y no sólo fue eso desarrollamos un vínculo amistoso de igual manera que nos permitió crecer como personas. Creo que gracias a esta primera experiencia mi criterio respecto a las relaciones se formó muy adecuado, por lo cual agradezco haberme topado con esa persona en mi vida.
Desafortunadamente en esta etapa nunca hubo una formalización de esas sensaciones, experiencias y momentos que estábamos viviendo, aunque realmente no nos era necesario ya que nuestras miradas y expresiones faciales lo decían todo.
Fueron cerca de 3 meses en los cuales esos signos de interrogación que habitaban en mi mente sobre mi futuro, fueron poco a poco desvaneciéndose y empezaron a aterrizarse. En este momento fue cuando me percaté de que realmente las cosas no son tan diferentes a una pareja heterosexual, es entonces cuando comprendí que la vida está compuesta de lapsos en el tiempo que van poco a poco haciéndonos madurar.
Él era alguien extraordinario viví excelentes momentos, hasta que desafortunadamente tuvo que cambiar de residencia por su trabajo hacia la ciudad de Monterrey. Me propuso vivir a su lado en dicha ciudad, pero no era mi momento, aún tenía planes que no podía posponer, y de los cuales dependía mi futuro por lo que no era una buena idea arriesgarlos por algo que pudiera llegar a ser efímero.
Son los momentos en donde las crisis existenciales se vuelven más irónicas que la propia realidad, en donde lo más obvio es lo correcto, ya que siempre será la mejor de las opciones el camino simple. Lo importante es no adjudicar elementos adicionales a los pensamientos expresados, ni dar cabida a la imaginación ya que sólo se inflará una mentira si se permiten esas acciones dentro de una relación.
Muchos cuestionamientos que me realice se enfocaban en base a si realmente yo me sentía lo suficientemente enamorado de esta persona como para atreverme a dar ese paso y es que en realidad no lo estaba, el tiempo me hizo comprender que fue la decisión adecuada y que no pude haber hecho algo mejor.
Él terminó decepcionado es base, argumentando lo poco comprometido que me encontraba con esta relación ya que después de todo él aportaba más a todo esto que yo y fui presa de mis inseguridades, razones principales por las cuales no di ese salto.
De esta manera Fernando, su familia, su departamento, su auto y todas esas tardes de charlas larguísimas sentados en su sofá con una taza de café se fueron en busca de otra versión mejorada de mí, en otra ciudad, en otro contexto, con la esperanza de que las siguientes oportunidades serían mejores, y realmente aunque tardaron en llegar, si fueron excelentes y cada una valió la pena.
Dentro de mí en ese espacio de tiempo las ideas me daban vueltas, y aunque continuaba saliendo y conociendo gente, nadie me ofrecía esa conexión intelectual y profunda que yo atesoré, lo cual me llevo a darme cuenta que lo que a mí me hacía sentirme pleno no era encuentros o salidas furtivas de horas, si no acercamientos más profundos y llenos de aprendizaje.
Así fue como cree mi percepción sobre mi aspecto sentimental y con gusto lo digo que he sido, hasta el día de hoy, fiel a estos ideales que centralicé. Sé y reitero que no ha sido fácil mantener estos elementos firmes, ya que cuando quieres y amas de esta manera es un hecho certero que todo viene acompañado de trozos faltantes de corazón que cada persona te va a arrancando cuando se alejan.

Es fácil y simple comprender a las personas, y es fácil y simple evitar situaciones incomodas en este aspecto siempre que la honestidad y la verdad lideren estas relaciones, aunque a veces las personas complican todo cuando exaltan sus inseguridades fruto de los miedos, por ello yo siempre he dicho que si se siente algo por una persona hay que confesarlo, si no es así de igual manera hay que compartirlo de forma directa sin temores y evitando los arrepentimientos, ya que todo en su conjunto, errores y aciertos forman esto que conocemos como “vivir”. 

#ExperienciasSensoriales

Capítulo 2


#ExperienciasSensoriales


Al terminar esta corta historia de situaciones inesperadas, me apague más a Estefany y salimos de manera más recurrente. Factor importante en esa etapa era Juan Carlos ya que no congeniábamos demasiado después de lo que pasamos, y ella conservaba el vínculo con él, por lo que me mantenía al límite entre ambos para evitar problemas entre cualquiera de los tres. El destino nos sorprendió cuando él se cambió de preparatoria y se alejó de nosotros, por lo que nos unimos más.
Todo se desarrolló cuando la invite a un bar en donde encontrábamos alcohol a pesar de nuestros 17 años, eran momentos mágicos las primeras cervezas de manera ilegal rogando porque no nos solicitarán identificación, cuando a la menor cantidad de bebidas de cebada terminábamos con altos grados de ebriedad. Eran divertidas esas ganas repentinas de reír sin explicación y sentirse tan bien de forma inesperada que no podía decir que no a ellas en cada oportunidad que tuve de experimentarlas.
El alcohol sin duda hace muchas cosas más llevaderas y abre puertas muy grandes entre las personas cuando cada uno borra límites y destruye barreras exponiéndose tal y como es, esperando obtener simplemente un buen par de oídos que sean capaces de digerir palabras que expresan filosofía, razonamiento abstracto y sobre todo llanto cuando las cosas no van como las esperábamos.
Así fue como cerveza, tequila, vodka y yo nos conocimos. Nos tomamos de las manos en momentos llenos de alegría en los que pasábamos noches y noches acompañados claro de la mejor música electrónica en los lugares más “trendy” del momento (“Nice” para mis tiempos), con las mejores amistades, comenzando a abrir una puerta que nunca me imaginé que estaría llena de tantas sorpresas.  
Aquel primer día dentro de un antro, no fue tan perfecto, y mucho menos fue exitoso, ni si quiera cumplió un poco con las expectativas que esperaba al respecto. Recuerdo que era Diciembre y le comente a mi madre la posibilidad de que me permitiera salir con mi amiga que ella ya conocía a uno de estos lugares extraños e inhóspitos para mí. A mis 16 años ella accedió condicionándome la visita como mi regalo de navidad de ese año.
Inmediatamente mis ojos brillaron de emoción y felicidad por que ella había dado el sí sin reproches, barreras o más comentarios al respecto siendo solo uno el que recibí y el más importante “si a tus 16 años te dejan entrar por mi puedes ir no tengo problema”.
Ese instante derrumbo todo lo creado en mi mente ya que comencé a generar ideas sobre cómo sería posible ingresar sin identificación. Más rápido que un hielo derritiéndose en una bebida en medio de un antro lleno en la mano de alguien que baila sin detenerse a las 12am, comente todo con Estefany e ideamos un plan al cual mi mejor amigo de la primaria se adhirió por voluntad propia el cual llamamos “pues vamos y si no entramos vemos que hacemos”. #GrandesIdeas
Nos dirigimos al lugar de moda de la ciudad Angels Club ubicado en la zona epicentro de vida nocturna en Guadalajara y llegamos preparados para todo. Hábiles cual gacelas, perceptivos cual lechuzas y sabios como búhos cazamos el momento ideal, ese instante cuando “el de la entrada” que ahora se conoce como “cadenero” se movía de su puesto.
Entonces se dio el momento en que el ingreso estaba libre sin nadie custodiándolo y como todos unos amigos ejemplares enviamos al más inocente como carnada, ese fue Cristóbal mi amigo de la primaria que mencionaba con anterioridad. Mientras tanto nosotros esperamos escondidos detrás de los matorrales y los autos para que “no nos ubicaran”. Casi era seguro su fracaso, pero fue portentosa la sorpresa cuando descubrimos que logro el ingreso y traía ese preciado sello en su muñeca que le permitía entrar y salir del lugar a su deseo.
Ni tardos, ni perezosos corrimos a pagar “el cover” y a que nos colocaran de igual manera el sello, operación la cual resulto exitosa y pudimos pasar. En ese momento me sentí realizado, vi como las luces se movían de un lado a otro, el sonido de la música, todos bailaban de forma genial y sentía que había sido algo inimaginable.
Nunca sospeche que años después esos tumultos me parecerían espantosos y que las gotitas de agua que me caían no eran precisamente agua, al igual que la gente se categorizaba en diversos estándares de acuerdo a su posición social, forma de bailar, físico, forma de besar, de tener sexo, por la manera en que olían, por la forma en que hablaban, por lo que tomaban, gracias al transporte en el que llegaban, por sus gestos, risa, ojos, color de piel, pantalones, cabello y hasta la forma de respirar. En pocas palabras, no tenía idea de en donde me estaba metiendo.
   Sin más me concentre en disfrutar y así fue baile un poco, reí, fume y siempre con una botella de cerveza en la mano, quien iba pensar que hasta la fecha esa imagen de mi sigue vigente. Sin embargo la Sra. Cerveza y yo no éramos muy amigos aún y ella sutil, fría y arrogante causo estragos en mí, dejándome ebrio de forma abrupta y termine mal, recostado sobre una mesa ignorando a todos.
Mis buenos amigos me trajeron un dogo (hot-dog) que me compraron fuera del antro para que disminuyera el efecto del alcohol en mi sangre, lo cual ya era tarde debido a que deje ir al primer ligue de mi vida en mi primera noche de antro, alguien de nombre Felipe quien confesó querer algo conmigo exactamente en el instante preciso que me encontraba devastado en la mesa. El agradecimiento más grande es a mi estómago porque ese día no vomite. #HeroeDeLaNoche
Contra todos los pronósticos y las apuestas mi primera noche en un “tuburio” fue tan decepcionante y amarga como un niño que se orina sobre su ropa cuando comienza a dejar el pañal, como un café con dos cucharadas de sal, como un sándwich de pollo cargado de ajo, jengibre y mostaza. Pero no todos los comienzos son buenos.
A pesar de todo lo sucedido no me rendí y seguí saliendo entregándome cada fin de semana a una nueva aventura cada vez más intensa y llena de emociones extremas donde el dinero no importa, ni el tiempo, ni las personas con las que estas compartiendo el espacio, lo más relevante es la experiencia sensorial.
 Continuaron las salidas privilegiando el Vida Café, lugar de reunión en esta ciudad donde tenía lugar la convivencia y los ligues a esa edad, ya que no necesitábamos identificación para el ingreso y sólo bebíamos literalmente café el cual hasta en ocasiones era descafeinado.
Ahí nos hicimos de un amplio círculo social al volvernos “populares” debido a nuestra vibra intensa y a que nuestros ojos estaban habidos de experiencias mostrando ganas intensas de vivir, lo cual nos fue concedido en pequeños trozos.

Empezamos conociendo a alguien en dicho lugar quien era toda una personalidad, su singularidad en la forma de hablar, expresarse y su estilo de vida conformaba toda una diva que se volvió de reconocido nombre en la ciudad por sus diversas acciones, él recibía el apodo de Ambar.